(Fotos: Agencia Xinhua, collage del blog)
Paula y Florencia, sintiendo el apoyo del público.
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Paula Ormaechea y Florencia Molinero, las singlistas argentinas en la última serie de Fed Cup, dejaron en evidencia su condición de jugadoras coperas ante las miles de personas que las alentaron incesantemente en el estadio Mary Terán de Weiss en el triunfo 4 a 1 ante China que le permitió a nuestro país ascender al Grupo Mundial II de la competencia.
Jóvenes de temperamento, las santafesinas disfrutaron el apoyo de los espectadores, interactuaron con el público y, más allá de las presiones, pudo percibirse que ese estímulo las hace crecer, las agranda, potencia su ya habitual capacidad de lucha.
Otro dato que sirve como indicador del ida y vuelta de las jugadoras argentinas -también de María Irigoyen y Mailén Auroux- con la tribuna: en todas las series de Copa Federación que tuve oportunidad de presenciar desde 1998, no recuerdo haber contemplado en otra ocasión, como ocurrió el fin de semana pasado, la conocida ola del público, que tuvo lugar en el segundo encuentro de Ormaechea, para alegría y emoción de la sunchalense.
La actitud de las chicas, entonces, invita a ilusionarse con seguir vivenciando series de locales que, además de ofrecer buen tenis, sean espectáculos entusiastas, festivos y de gran clima emotivo. El tenis femenino argentino, ciertamente, está creciendo.
Prensa A.AT.
Maria Irigoyen y Mailén Auroux se entremezclaron con la hinchada.
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